¿Qué diferencia existe entre la formación profesional y la formación para el empleo?

Formación profesional y formacion para el empleo
Rate this post

En España, encuentras dos tipos de formaciones, la profesional y para el empleo. Ambas son formaciones que buscan mejorar las habilidades y ampliar el conocimiento, sin embargo, sus características son diferentes.

¿Qué es la formación FP y la formación para el empleo?

La formación profesional, también conocida como formación reglada, se trata del conjunto de enseñanzas que forman parte del Sistema Educativo Español.

Se imparten de manera presencial, a distancia o mixta, tanto en centros de enseñanza públicos como privados, en colegios e institutos, academias oficiales de formación o en Universidades.

Al finalizar la formación, recibes un título oficial que tiene validez académica, ya sea a nivel nacional o internacional.

Por su parte, el sistema de formación para el empleo, abarca la formación que no está dentro de la FP. Es el tipo de formación para la inserción laboral y la mejora profesional de los empleados.

Por lo general, esta formación se enfoca en las capacidades demandadas de un empleo, las cuales no se encuentran dentro de una formación reglada. Aunque la titulación obtenida no siempre es oficial, si tiene validez curricular, lo que facilita la búsqueda y obtención de empleo.

La formación para el empleo brinda diversos cursos que se orientan más que nada al mercado laboral, incluyendo temáticas que van desde el diseño gráfico, cocina, empresa, administración, auxiliar de vuelo, entre otras.

¿Quién puede acceder a cada tipo de formación?

Una diferencia importancia entre la formación FP reglada y la formación profesional para el empleo, es quienes pueden acceder a ellas.

formacion-regulada-ciclo-de-FP

En la formación reglada puedes acceder a ella desde los 15 años, o bien, después de cursar el primer ciclo de la ESO, siendo posible acceder al nivel más básico.

Mientras que para acceder a los cursos FP de grado medio o superior, tienes que finalizar el segundo ciclo de la ESO y el Bachiller. Además, en la formación profesional para el empleo, no todos accederán a la misma, ya que depende de los estudios previos terminados.

Composición de los dos tipos de formaciones

Otro aspecto donde se diferencia estos dos tipos de formaciones es en la composición de las enseñanzas.

La formación profesional reglada está compuesta por la educación infantil, la primera, la secundaria obligatoria, la profesional, la universitaria y la de Régimen Especial.

Por su parte, la formación para el empleo se conforma por diferentes iniciativas, como la formación bonificada o de demanda, la programa para las empresas para los empleados, la subvencionada, o de las administraciones competentes para trabajadores o desempleados.

Los cursos de formación para empleados en activo se imparten en clases estatales o sectoriales, la finalidad de estos estudios es refrescar y mejorar los conocimientos de los trabajadores.

Mientras que, la formación enfocada en los desempleados, tiene como objetivo la capacitación de los individuos para entrar en el mercado laboral, incluso se realizan prácticas en empresas para ganar experiencia.

También se diferencia en quienes dependen, dado que no son los mismos organismos para la FP y la formación para el empleo. En el primer caso, la formación profesional depende del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte de las Comunidades Autónomas.

La formación para el empleo está vinculada con el Ministerio de Empleo y Seguridad social, por medio del SEPE y de las Comunidades autónomas.

¿Qué objetivos persigue cada formación?

La formación profesional reglada y la formación para el empleo cuentan con objetivos diferentes.

formacion-profesional-reglada

La primera busca enseñar y preparar a los estudiantes, con una formación enfocada en conocimientos y habilidades comunes, para que realicen una actividad profesional en específico.

Por su parte, la formación para el empleo tiene como finalidad incrementar la productividad de los empleados dentro de las empresas, y cubrir las demandas dentro del mercado laboral.

Este tipo de formación se adapta a la sociedad y las necesidades específicas de cada grupo, para brindar estudios que permitan a los profesionales cubrir estos puestos.

¿Cómo te ayuda la experiencia laboral?

La experiencia laboral te puede ayudar a conseguir el certificado de profesionalidad, de acuerdo con el Real Decreto que regula esto.

Para conseguir el certificado, debes superar todos los módulos formativos que correspondan al certificado de profesional, o bien, a través de procesos de evaluación y acreditación de las competencias profesionales obtenidas con la experiencia laboral.

También se toman en cuenta las habilidades obtenidas por vías no formales de formación, de acuerdo con lo indicado por la normativa.

La Administración Pública y las Comunidades Autónomas, realizan convocatorias donde puedes presentarte y conseguir el certificado de profesional, gracias a tu experiencia laboral previa.

Es importante cumplir con los diferentes requisitos exigidos, aportando la documentación que demuestra la experiencia laboral, y la formación recibida.

Cuando superes la evaluación correspondiente, pasas a demostrar tus habilidades y conocimientos en la competencia profesional, en las diferentes pruebas indicadas por la Comisión.

Por lo tanto, puedes aprovechar la experiencia laboral para obtener el certificado de profesionalidad, mejorando así tu currículum.

La formación profesional gradual y para el empleo, cuentan con diferentes importantes que debes considerar a la hora de estudiar para convertirte en un profesional competente.

En cualquier caso, ambas son esenciales para formarte y adquirir las habilidades necesarias para cubrir las demandas en el mercado laboral.