Banco Tradicional vs. Prestamistas

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En el momento en que una persona decide solicitar un préstamo, suele tener la opción de escoger entre 2 alternativas principales: recurrir a la banca tradicional, o acudir a un prestamista.

Sin embargo, resulta esencial tener en cuenta que ambas opciones poseen ciertas ventajas, pero también algunas desventajas que conviene considerar para poder tomar la mejor decisión.

Así, por ejemplo, a la hora de pedir un préstamo se podría decir que los bancos destacan por ser los más asequibles, sin embargo, los prestamistas suelen distinguirse por ser mucho más rápidos en cuanto a la concesión de dinero solicitado.

Pero eso no es todo, ya que existen muchas otras diferencias entre estas dos alternativas; y es precisamente por esto que este artículo se enfoca especialmente en hablar del banco tradicional vs. los prestamistas.

¿Qué es un banco tradicional?

Los bancos tradicionales consisten en una entidad financiera la cual se caracteriza por contar con licencia no solo para poder recibir depósitos, sino también para conceder préstamos.

Asimismo, cabe señalar que existen ciertos bancos que además se dedican a proporcionar otros servicios financieros, por ejemplo, cajas de seguridad, gestión de patrimonio, y  cambio de divisas, etc.

En cualquier caso, es posible distinguir las siguientes clases de bancos:

1.       Bancos centrales

Tienen la función de velar por el funcionamiento adecuado de todo el sistema financiero en el país.

2.       Bancos comerciales

Consisten en la mayor parte de los bancos conocidos actualmente; los cuales se encargan de forma exclusiva de las operaciones comerciales que tienen lugar dentro de la banca, es decir, de las actividades asociadas al ahorro y el financiamiento, exceptuando la inversión.

3.       Bancos de inversión

Se encargan de todo lo relativo a la inversión de particulares o empresas, incluyendo la compraventa de acciones, adquisición de empresas, participación dentro de operaciones de fusión, y también captación de capital.

4.       Banca corporativa

Su actividad no está enfocada a particulares, sino que se especializa en grandes empresas que requieren servicios de inversión, y/o  financiamiento.

5.       Bancos de consumo

Se dirigen a la persona física que requiere una tarjeta de crédito, préstamo personal, hipoteca, etc., es decir, operaciones bancarias asociadas al consumo tanto de bienes como de servicios, y son igualmente denominados bancos retail.

6.       Bancos hipotecarios

Se enfocan en el mercado de hipotecas, especializándose en la asignación de hipotecas para reformas, o adquisición de viviendas, locales comerciales, garajes o cualquier otra clase de inmuebles.

7.       Cajas de ahorro

Son entes financieros sin ánimo de lucro, los cuales poseen un gran carácter social.

¿Qué son los prestamistas?

Los prestamistas destacan por ser agentes económicos los cuales se dedican a prestar dinero no solo particulares, sino también a empresas, a cambio de que este préstamo sea devuelto dentro de un lapso de tiempo previamente establecido, junto a un porcentaje de interés convenido por ambas partes.

En el caso de los prestamistas, se pueden distinguir los siguientes tipos:

  • Prestamistas particulares: Son personas físicas las cuales, por iniciativa propia, suelen usar su capital para otorgar préstamos y conseguir ciertos beneficios económicos, logrando así rentabilizarlo.
  • Entidades privadas: También conocidas como Establecimientos Financieros de Crédito (EFC), consisten en entidades autorizadas para hacer operaciones de crédito.

Cuentan con una desarrollada estructura empresarial, y son supervisadas por el Banco de España.

  • Entidades públicas: Además de ofrecer préstamos y también ayudas económicas, pueden actuar como intermediarios para la aprobación de créditos.

Bancos tradicionales vs. prestamistas

Ahora bien, a continuación se presentan varias de las diferencias que existen entre los bancos y los prestamistas, los cuales conviene conocer para saber que opción es mejor al necesitar financiación.

Bancos

Dentro de sus aspectos positivos, es posible señalar el hecho de que otorgan préstamos más baratos, los cuales rondan entre 9-15%, y en caso de impago, suelen enviar primero un aviso antes de comenzar a cargar comisiones de demora; por lo que los datos de los prestatarios no son inmediatamente incluidos en ASNEF.

Sus préstamos se encuentran en un marco jurídico y reglamentario que abarca obligaciones y derechos que ambas partes deben cumplir, lo cual asegura que este tipo de operaciones se cumplirán de acuerdo a las condiciones señaladas al contratar sus productos.

En caso contrario, los prestatarios pueden presentar reclamaciones, además, la banca tradicional también proporciona instancias de negociación que permiten refinanciar los préstamos.

Sin embargo, entre sus desventajas destaca el hecho de que demoran semanas analizando cada caso, y normalmente exigen información sobre el uso que se le dará al dinero; además de estudiar exhaustivamente tanto las cuentas, como la situación económica de los prestatarios previo a conceder el préstamo.

Prestamistas

Dentro de sus ventajas, destaca especialmente el que en la mayoría de los casos suelen conceder los préstamos solicitados, y lo hacen en un reducido lapso de tiempo, ya que solo demoran horas o minutos.

Asimismo, sus contratos son más simples e incluyen menos letras pequeñas; además de no exigir a los prestatarios que informen el uso que harán del dinero.

Por su parte, tienen entre sus inconvenientes el hecho de ser considerablemente más costosos, siendo posible que sus intereses alcancen hasta un 50% del TAE.

Además, en los casos de impago es común que los prestamistas ingresen rápidamente los datos de los prestatarios dentro de registros de morosidad como ASNEF o RAI.

Además, la mayoría de los prestamistas realizan sus operaciones sin estar en el marco que se encarga de regular al mercado financiero, por lo que su contratación puede llegar a suponer ciertos riesgos de terminar pagando unos altos intereses.